Cuando eres preparador, todos esperan tu caída.
Hace ya un año, finalicé un período de mi vida que inicié dos ciclos solares atrás. El encantador, atrayente y engañoso mundo de "El Preparador".
A continuación, resumiré los 8 puntos sobre la experiencia:
1.- Los estudiantes te odiarán no importa lo que hagas. No estás graduado, pero les das clase y ocasionalmente evalúa: es una justificación válida.
2.- Si ocurre que te aman, resultará ser el último semestre en el que estarás en el cargo. True Story.
3.- Todo lo que digas o hagas será utilizado para justificar sus propios errores.
4.- Si de casualidad te "relacionaste" con una de las alumnas que asesoras, prepárate para momentos incómodos, MUY incómodos.
5.- Aprederás lo que es corregir 40-50 prácticas semanales por 15 semanas seguidas.
6.- Descubrirás que darle tu número telefónico a 40-50 personas no es buena idea. Cuando se acercan los exámenes o el final del semestre, 325 llamadas perdidas no te parecerá extraño.
7.- El pago no justifica el esfuerzo a menos que seas masoquista, millonario o hippie. Es la única explicación que me he logrado dar.
8.- Al final, te das cuenta que lo disfrutabas y que "no suena tan mal eso de ser profesor..."
Habrá un próximo "La desgraciada vida del Profesor"?
Continuará...

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